“On the Road”: por qué la película no traicionará las expectativas

Para algunos fue una decepción no encontrar ‘On the Road’ de Walter Salles en las selecciones Festival de Cine de Venecia, otros dieron un suspiro de alivio. Ellos son los que piensan que, a veces con razón, las obras maestras de la literatura no pueden traspolarse al cine – y el libro de Jack Keroauc está en este grupo sin duda – porque no es bueno para nadie, ni para el público ni para la obra literaria. Y mientras que el productor Charles Gillibert ha anunciado por Twitter que la película se estrenará en 2012 y el primer trailer se estrenará después del verano, la curiosidad crece. Por que ‘On the Road’ no puede ser tomado como un film cualquiera no para quien ha leído a los 15,16, 17 años en la incredulidad de un descubrimiento fechado nada menos que en 1957.

Fue hace 54 años que la novela se publicó en los EE.UU., Kerouac había completado tres semanas pasando a máquina lo que había escrito a mano de manera insitintiva, espontánea, que lo llevaría a la otra orilla. En Italia, Mondadori publicó “On the Road” en 1959 con la traducción de Magda De Cristofaro y la introducción de Fernanda Pivano. Una Biblia, un manifiesto a favor de los jóvenes, con el sueño de la Generación Beat llegó demasiado pronto y se ha ido demasiado pronto, comido, quemado como los “fuegos artificiales amarillos estallando fabulosos como arañas entre las estrellas y en el centro se ve la luz azul de la explosión y de todo el mundo Ooohhh! “, en palabras del mismo Kerouac.



Pero volvamos a la película, para tranquilizar a quienes temen que Salles no encuentra en la transposición del “espíritu” de la novela, es el hecho de que los derechos del film han sido propiedad, durante décadas, de Francis Ford Coppola, una garantía que la biblia beat no terminarían en las manos equivocadas. Este es el motivo por el cual sólo hoy el cine se ha apropiado de la historia, no es que durante todo este tiempo no se hayan realizado algunos guiones, al contrario se han cimentado y desehecho escenas sobre la parabola de Moriarity Dean y Sal Paradise (Neal Cassady e Jack Kerouac) sobre las rutas americanas. De Barry Gifford, a Russell Banks, a Roman Coppola, fhijo de Francis, pero ninguna había encontrado el centro.
Según rumoresCoppola quería que actores desconocidos interpretaran la parte de los dos protagonistas, pero los estudios querían a las estrellas, de la talla de Johnny Depp, Brad Pitt, Colin Farrell y más, Coppola quería que fuera en blanco y negro y los estudios querían en color. En resumen, nadie parecía saber en qué dirección ir en un tira y afloja que duró casi treinta años.

Luego vino, Diarios de motocicleta en 2004 dando como resultado el reconocimiento internacional, del guionista José Riviera que fue nominado a un Oscar, Walter Salles, el director brasileño ha recibido otros premios. Francis Ford Coppola había encontrado su pareja para su Kerouac, Diarios de Motocicleta habla de un par de chicos – uno de los cuales es Ernesto Guevara (El Che) viajan por América del Sur en una motocicleta, una Norton ’39. En el camino se trata de un par de chicos alrededor de América del Norte a bordo de un Hudson ’49 …



Son parte del gran elenco nombres como Viggo Mortensen, Kirsten Dunst, Steve Buscemi, Kristen Stewart, Amy Adams, Alice Braga, Elisabeth Moss, Tom Sturridge y Danny Morgan. Jack y Neal es Sam Riley (Joy Division), Kerouac es Garrett Hedlund (Tron y Country Strong), Cassady. Tomado de Diarios de motocicleta, así como el escritor también director de fotografía Eric Gautier, el diseñador de producción Conti Carlo y compositor Gustavo Santaolalla.
La película se rodó entre agosto y diciembre de 2010 en Montreal, Nueva Orleans, México, San Francisco y muchos otros lugares. Lo que es más, estamos leyendo el mismo periódico que Walter Salles fue en busca de una autenticidad todavía mayor, por lo que sin saberlo casi todo el mundo que él y Garrett Hedlund salieron a las calles por segunda vez en abril de 2011. Pasaron dos semanas viajando 4.000 millas en un Hudson del 49 por las calles de Estados Unidos. Se han evitado deliberadamente las carreteras construidas después de 1950, volviendo sobre el camino lo mejor que pudieron en el ideal original de Jack y Neal Lane. E incluso este detalle es un buen augurio para el éxito de la película.

A través de la búsqueda de un intangible “algo” (la conciencia de sí mismo, un camino interior) dice de la obra maestra de Kerouac en la parte inferior de la falla del sueño americano y la reacción de la sociedad que ahora están inmóviles y cristalizadas en su certeza de que se manifiesta en una movimiento sin fin, con un deseo sin escrúpulos e irresponsable de vivir libre y sin restricciones.

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